Nuestro tema central reside en una revalorización de un recurso natural indispensable para la existencia de nuestro mundo.
El agua, “Oro Azul”, es una reivindicación de la naturaleza, que nos brinda la posibilidad de existir; existir como humanos.
Un sector del arte actual recupera la función crítica. A pesar del desalentador panorama que ofrece este comienzo de siglo.
Nosotros salimos al encuentro de un río que quiere ser generador de conciencia.
A conquistar el espacio físico con una instalación que rompe con el tradicional trabajo de la materia; en donde la materia se convierte en inmaterial.
Donde los materiales no nos esperan se empujan unos a otros para abrir paso a través de transparencias y poéticas reflexiones a este mundo.
Donde la palabra toma importancia.
Se transparenta en lo cotidiano.
La ausencia nos llueve, nos duele.
Donde una gota nos refresca, nos refugia.
Porque cada vez que nos acercamos a un río, en su recorrido no encontramos las mismas gotas, ellas viajan, son historia, espejos de nuestras miradas.Una, dos, tres, incontables gotas se convierten en río generando vida.